martes, 5 de febrero de 2013

Jarabe rápido para resfriados

JARABE RÁPIDO PARA LOS RESFRÍOS Y GRIPES
La cebolla (allium cepa) tiene propiedades antisépticas, antibióticas, analgésicas, antiinflamatorias, desintoxicantes i expectorantes (sobre todo las picantes). Sus potentes efectos se deben a los compuestos azufrados que se activan al cortarlas.
El poder antibiótico se halla en esas substancias volátiles que nos irritan los ojos, por ello la cebolla hervida ya no tendrá estos efectos. Si queremos este efecto terapéutico tendremos que mantenerla cruda.
Podemos preparar un sencillo i rápido jarabe que nos aliviará de manera natural los síntomas de la gripe o el resfriado i ayudará a fluidificar las mucosidades. Al mismo tiempo nos aportara muchas otras substancias fitoactivas, además de minerales i vitaminas extra.
Necesitamos un tarro donde nos quepa una cebolla cortada finamente, añadiremos también jengibre rallado o cortado finamente, podemos añadir un poco de tomillo i zumo de limón, cuando lo tengamos todo metido en el tarro añadimos miel de buena calidad. Los ingredientes comenzaran a macerarse rápidamente i en pocos minutos veremos cómo se empieza a formar un jugo. Este jugo lo iremos tomando a sorbitos durante todo el día.
El jengibre estimulará la inmunidad, el limón nos aportará un buen antioxidante: la vitamina C, i el tomillo reforzará el sistema respiratorio. La miel hará más agradable el jarabe para los niños i ayuda a la maceración de la cebolla, el tomillo i el jengibre.
Si estamos en un proceso de catarro o gripe será bueno calentar e hidratar el cuerpo con líquidos salados, como la sopa de miso, o la sopa silvestre (ver entradas anteriores) que se puede hacer con las hierbas secas. Debemos evitar los productos refinados y los azúcares, tomar con los caldos cereales que calienten y no den demasiado trabajo al sistema nervioso, que sean de lenta absorción, y ayuden a desinflamar i descongestionar como por ejemplo el arroz integral o la avena.
Para finalizar nos gustaría añadir una información importante en referencia a la acción anticancerosa de los compuestos azufrados. Estos compuestos presentes en el ajo y la cebolla tienen la propiedad de prevenir ciertos tipos de cáncer, en especial  el de estómago y esófago, aunque también se han observado efectos en el cáncer de pulmón, mama y colon. Las substancias fitoactivas contenidas en el ajo i la cebolla inhiben los carcinógenos y ayudan a su eliminación. Por lo tanto si consumimos alimentos ricos en estos compuestos azufrados ayudamos a mantener limpio el organismo y nuestras células están menos expuestas a los carcinógenos que pueden mutar su ADN.