Mi tentempié un yogitea y unos frutos secos |
Muchos de los asistentes del último curso Zen de noviembre estuvisteis interesados en ampliar el tema de la
alimentación saludable y consciente, os dije que publicaríamos una entrada en
el blog y… ¡aquí la tenéis! Espero que os sea fácil y de utilidad.
Las enfermedades inflamatorias son algo común en nuestra sociedad
occidental donde la alimentación pasa por la estantería del supermercado y
hemos perdido el contacto con la naturaleza y sus regalos frescos, saludables y
vitalizantes.
Muchos comemos fuera de casa, y aunque cada vez más trabajadores se llevan
su tupper de casa, hay que saber qué nos va
a sentar bien, qué nos saciará y qué nos permitirá sentirnos ligeros y vitales al
mismo tiempo.
La clave está en los productos frescos y de proximidad, en los colores
variados, en las hierbas y en las especies, las cuales no pueden faltar. En el caso
de sufrir un proceso inflamatorio, o que implique un estrés en el organismo, como procesos crónicos o infecciosos,
siempre nos irá bien algún suplemento adaptado al proceso, que principalmente
serán antioxidantes.
Los principales antioxidantes están presentes de forma natural en la comida
diaria, y son la vitamina A que encontramos en el beta caroteno presente en
todas las frutas y hortalizas de color naranja, la vitamina E (presente en frutos secos, aceites de semillas de prensión en frío y hojas verdes), la vitamina C ester, es decir ligada a los flavonoides de los cítricos.
Esta vitamina C esterificada se convierte también en protectora renal. La vitamina
D, y la L-glutamina, ésta última es la precursora del glutatión, un poderoso antioxidante.
La silimarina del cardo mariano también es
una precursora natural del glutatión a nivel hepático, además de los otros
muchos beneficios que nos puede aportar (recientemente un estudio en el
Hospital Universitario Doctor Josep Trueta de Girona utilizó la silimarina, para reducir el tamaño de un tipo de tumor
cerebral de manera significativa).
Los ácidos grasos omegas también tienen un papel decisivo y marcan la
diferencia en la recuperación de la salud, pero éstos deben estar en la
proporción adecuada. El que más presente debe estar es el omega 3, algunos
aceites como el de lino nos aportan una buena cantidad de este omega 3 de origen
vegetal, y también el alga nori de sabor muy rico en sopas. Los omega 3 de
origen vegetal son de cadena media mientras que las fuentes animales, como son
los aceites de pescado, aportan omega 3 de cadena larga. Las dos procedencias
son igual de beneficiosas.
Todos estos suplementos tienen que ir acompañados de una saludable flora
intestinal. La flora intestinal es la que nos coloniza al nacer y proviene de
la madre, como esté la flora de la madre en ese momento así será el nivel de
defensas que nos dé. La flora saprofita se adapta a lo que comemos y así crecen
unos u otros microrganismos creando un equilibrio. Hay floras más saludables
que otras. ¿Cómo ayudar a tener una adecuada flora intestinal? Principalmente
manteniendo una buena calidad del alimento, realizando buenas combinaciones (dieta
higienista), y tomando alimentos fermentados como yogurt, chucrut, kéfir, tamari,
frutas, y alimentos con fibra presente de manera natural, entre otros.
Cuando nos encontramos mal, el apetito decrece, el cuerpo necesita centrarse
en la recuperación. Es en estos momentos que podemos hacer uso de la dieta nº7
de la macrobiótica, esta dieta se corresponde con la de 100% cereal. Ya os he hablado
muchas veces de ella y de cómo se puede adaptar a las personas convalecientes. Gracias
a esta manera de preparar el alimento es más fácil salir de procesos
inflamatorios, incluso en personas mayores. En mi familia fue un gran
descubrimiento que ayudo a mi hija mayor a dejar el asma atrás, y a mi madre la ayudó a resolver la
inflamación de las articulaciones. Es un bálsamo para el cuerpo y el sistema
digestivo. Aportamos hidratos de carbono, todos los oligoelementos y ácidos
grasos sin forzar al organismo con digestiones pesadas, se puede acompañar de
la sopa silvestre caliente, la cual aparece en este blog. La dieta de 100% cereal ayuda a centrar la mente y nos desintoxica de
substancias adictivas como la nicotina, la cafeína, los chocolates excesivos y
con mucha cantidad de azúcar, elimina mucosidades molestas, etc. Todo esto tiene un efecto rápido de centrado
de la mente y el pensamiento, se dejan atrás estados de tristeza, adicciones, y
las meditaciones son más profundas y con mejores resultados.
Es muy importante dejar atrás todos los alimentos industrialmente
refinados, los azúcares refinados, las grasas manipuladas como las hidrogenadas,
la sal refinada o cloruro sódico (en su lugar usaremos sal marina sin aditivos
y sin refinar), e introducir alimento vivo y crudo acompañando al cocinado.
Por las mañanas hay que hacer el esfuerzo de un alimento saludable, hay que
aprender a desayunar sano todos los días. Tener estrategias saludables para el
segundo almuerzo, saber escoger la
comida del medio día, la merienda y finalmente nos podemos esmerar en la cena que
compartiremos con la familia. Hay que diseñar un menú sencillo agradable y que se adapte a los tiempos del día a día, que nos dirija a qué
necesitamos ir a buscar al supermercado y a las tiendas que nos ofrecen algunos
alimentos específicos más saludables y básicos.
Por la mañana nos va a sentar bien la fruta, a media mañana los frutos
secos, en la comida una proteína contundente con buenas y abundantes verduras,
por la tarde ya podemos introducir unas tostadas con lo que más nos guste pero
siempre que haya alimento vivo. Y para la cena un buen cereal cocinado de
manera apetitosa, fácil y rápida, como puede ser una quinoa con verduras, mijo
o arroz integral, que nos inducirán al relax, a una buena meditación antes de
ir a dormir y a un sueño reparador. Ah! y
no podemos olvidar las agradables infusiones que nos acompañan durante el día y
nos hidratan cuidándonos y aportando minerales y antioxidantes naturales, a mí
me gustan mucho las combinaciones de Yoguitea, pero hay muchas otras que podéis
combinar en función de vuestra edad y prioridades, por ejemplo yo siempre añado
salvia porque ya estoy en mis casi cincuenta años, pero es importante introducir infusiones agradables que hagan diana en pulmón, hígado y riñón. Otras de mis tiendas
favoritas por su honestidad, buen trato y buen producto es Biohorta de Girona,
allí encuentro todo lo que necesito o bien lo puedo encargar. Para suplementos
específicos compro por Internet en Farmacia Internacional los productos de la
marca Solgar.
Hay muchos estudios ya que muestran los beneficios de las técnicas de
meditación de manera científica, y que también nos ayudan a mantener los radicales libres a raya, por ejemplo este artículo de la University
of Texas Health Science Center at San Antonio, United States of America, es
muy interesante y en él se afirma lo siguiente:
“Es importante destacar que este estudio demuestra que durante una sesión
de práctica de RR se inducen cambios rápidos en la expresión de los genes (en la escala de minutos) y que están vinculados a un conjunto selecto de vías
biológicas en los practicantes de RR a largo y corto plazo, éstas podrían
explicar los beneficios
para la salud de las prácticas de RR. Estos
genes han sido vinculados a vías responsables del metabolismo energético, la
cadena de transporte de electrones, la oxidación biológica y la secreción de
insulina. Estas
vías desempeñan un papel central en la mecánica de la energía mitocondrial, la
fosforilación oxidativa y envejecimiento celular. La
hipótesis es que la regulación positiva de los conjuntos de genes de oxidación
biológica puede aumentar la eficiencia de las reacciones de oxidación-reducción
y, por tanto, reducir el estrés oxidativo.”
*RR= respuesta a la relajación.
Bhasin MK,
et al. Relaxation
response induces temporal transcriptome changes in energy metabolism, insulin
secretion and inflammatory pathways. PLoS One.
2013. Disponible en:
Estoy muy feliz de ver como los alumnos de los cursos zen avanzan en sus
vidas resolviendo problemas que parecían no tener muchas opciones médicas, más
que paliar dolor y síntomas, estoy feliz de ver, por ejemplo, como los que
siguen practicando la técnica dejan las infiltraciones, las morfinas y los
bastones. Les estoy muy agradecida porque me dan fuerza para seguir dando
clase. Muchas gracias desde el corazón!! J
Blibliografía recomendada:
Anticáncer una nueva forma de vida, del
Dr. David Servant
Los alimentos contra el cáncer del Dr. Beliveau y Gingras
Macrobiótica Zen, de Georges Oshawa