domingo, 22 de enero de 2017

MENSAJE NUTRICIONAL DE HOY

COME COMIDA DE VERDAD!!

Hoy en día la ciencia nos aporta grandes conocimientos sobre la nutrición, sabemos mucho, y los conocimientos están al alcance de todos en publicaciones científicas de fácil acceso.

La evidencia científica ha demostrado que lo que comemos puede reducir el riesgo de desarrollar enfermedades del corazón y diabetes, y evitar algunas formas de cáncer, hipertensión y osteoporosis.

Cuando las campanas de la privatización de la sanidad resuenan sobre nuestras cabezas como población sufriente de los procesos políticos, tomar decisiones saludables es más importante que nunca.

Pero, ¿estás seguro de que estás haciendo lo correcto? Mucha información también puede hacer que nos perdamos en un mar de dudas de opiniones contradictorias, a lo que se suma todo el trabajo publicitario engañoso para vender productos de moda.

Tenemos que basarnos en hábitos reales y en el ejemplo de personas que recuperan su salud gracias al cambio hacia una nutrición real, ¿por qué no cambiar y comprobarlo por uno mismo?

La diferencia está en querer, en hacer o no hacer, pequeños cambios llevan a grandes cambios y a una vida nueva, ¿quién no quiere eso?

Aquí entra en juego nuestra psicología, observemos bien!! qué nos aporta la enfermedad, los dolores, los achaques, OBSERVA!!

Cuando al observar aceptas tus “no puedo” o los “es imposible para mí con mi ritmo de vida”, cuando dejas esos lastres de personalidad anclada...YA HAS DADO EL PRIMER PASO.

Asegúrate de que estás haciendo las elecciones de alimentos adecuados para tu buena salud.

Los platos que confeccionamos han de ser el máximo de sostenibles posibles, así que vamos a evitar el producto industrializado y empaquetado, que además va a contener muchos químicos, sal y azúcar.

Los carbohidratos han de ser saludables: el cereal se debe escoger entero en su gran mayoría, dejar los refinados a los que se han agregado químicos y azúcares. Por ejemplo un alimento básico como el pan ha de ser de buen grano, variado en cereales, de levadura madre y con sal marina. El arroz, la quinoa, el mijo, el trigo sarraceno y muchos otros han de ser integrales y de cultivos sostenibles.

Las grasas son preferibles en crudo y de buena calidad: tenemos muchas opciones como el buen aceite de oliva español, la pasta de semillas, el aceite de coco, el aguacate.

Proteínas sí pero sin pasarse con las de origen animal, ya sabemos que podemos encontrar proteínas también en el mundo vegetal como las variadas y ricas legumbres, o contar con que la avena contiene todos los aminoácidos que necesita un ser humano.

Utilizar a diario el poder de las especias y de las hierbas (salvia, regaliz, cardo mariano, boldo, llantén, anís estrellado, canela, jengibre, cúrcuma, pimienta, ajo, cilandro, cola de caballo, té, etc), que adaptados a nuestras necesidades y nos aportan salud, bienestar y placer natural.

Las frutas y verduras en crudo nos aportan nutrientes que nos protegen y antioxidantes poderosos.

Crea tus propias estrategias de desayuno y merienda saludable. Escoge aquello más natural para tus comidas y cenas allí donde estés.

Por ejemplo yo siempre desayuno un zumo de zanahoria, remolacha, manzana, y limón como base, este zumo aporta fitonutrientes antioxidantes importantes y es probiótico natural. Junto con este zumo añado suplementos que me favorecen, como el llantén, la quercetina, y aceite de onagra. Media hora más tarde, tomo un buen pan de cereal ecológico integral, que tuesto y al que añado aceite de oliva y gomasio (sésamo con sal marina), esto lo acompaño con una buena infusión variada no excitante, o un vaso de leche vegetal con achicoria. Es mucho más apetitoso que un café con leche rápido que favorecerá  procesos inflamatorios, en especial procesos fibroquísticos, y pérdida de calcio, y que se suele acompañar con croissants, pastas, o panes blancos. Hay muchas variedades naturales al desayuno que pueden cambiar nuestra vida, y nuestra conciencia. Cuanto más natural es la comida más fácil es conectarnos con nuestra esencia humana.

No hay una única dieta saludable, pero si hay muchos patrones saludables en todas las culturas, hay que revisar los cambios que no nos han favorecido, como la incorporación de la leche de vaca obtenida de manera industrial, relacionada con la pandemia de obesidad infantil, además de con el sufrimiento animal a gran escala añadido. Recordemos los estudios científicos que recogen información sobre los países orientales, en los cuales culturalmente no se toma leche de animal, la incidencia de cáncer de mama, colon y próstata son muchísimo menores que en los países industrializados, y podemos observar como esa población al emigrar a dichos países y asimilar la nueva manera de alimentarse igualan sus tasas de cáncer.

Inflamación y oxidación pueden ser en gran medida regulables a través de la alimentación saludable. La manera más natural de alimentarse aporta variedad, felicidad, conciencia, claridad mental y placer real.

Obesidad y su implicación en el cáncer de mama. Nutr. Hosp. [online]. 2011, vol.26, n.4, pp.899-903. ISSN 0212-1611.
El estudio prospectivo europeo sobre cáncer y nutrición (EPIC) González, C. A et al. (2004). Revista española de salud pública, 78(2), 167-176.

Componentes bioactivos de alimentos funcionales de origen vegetal. Serrano, M. D., López, M. L., & Espuñes, T. D. R. (2006). Revista Mexicana de Ciencias Farmacéuticas, 37(004), 58-68.